En una noche cargada de nostalgia, emoción y un aura de reencuentro, el pre-festival de Tashubu abrió sus puertas, el pasado 10 de febrero, para dar la bienvenida a un elenco de artistas que volvieron a casa. Bajo el lema de este año, “REGRESAR, … y cada cual volverá a su familia”.  En el escenario, la magia se desplegaba con cada movimiento, con cada nota de música que resonaba en el aire. Quince grupos, algunos de ellos ausentes del escenario por más de dos décadas, regresaron para deleitar a una audiencia ansiosa con su talento y pasión por el arte del baile.

Es difícil describir con palabras la emoción palpable que impregnaba el ambiente cuando estos bailarines se reunieron con sus familias artísticas y rememoraron tiempos pasados. Desde el momento en que pisaron el escenario, se podía sentir la electricidad en el aire, la chispa de la creatividad y la devoción que los había traído de vuelta.

Cada coreografía era más que un simple baile; era un viaje a través del tiempo, una oportunidad para revivir recuerdos, compartir risas y lágrimas, y celebrar el poder del arte para conectar corazones. Algunos presentaron nuevas coreografías, mientras que otros optaron por revivir los clásicos que los habían catapultado a la fama en años anteriores.

Para muchos de estos artistas, este regreso al escenario fue un momento que nunca olvidarán. Fue un recordatorio de la pasión que los impulsó a seguir adelante en los momentos difíciles, un tributo a las amistades forjadas en el calor de la creatividad y un homenaje a las personas que los inspiraron a perseguir sus sueños.

Los esperamos en esta gran noche de remembranza y familia, el lunes 4 de marzo de 2024, a las 20:00 horas en el Foro Aviv de la Tussie Arena. 

// Rebeca Kaplan